TIERRA DE PINARES

CONDES DE MIRANDA

Cuando entré por las puertas de las tierras y heredades de los Condes de Miranda, comprendí de un solo golpe la historia y el sentir de la España mas arraigada, añeja y Castellana. Rancios a más no poder, como la corteza de un queso viejo y oloroso, son los lugareños de este milenario terruño lleno de cebada, patatas, fresas que duermen bajo tierra en las noches heladas de enero, y pinares frondosos y perfumaos de los que se obtienen esas perlas blancas alargadas de un sabor cremoso e intenso, como son sus famosos Pingones... Grandes vegas que se topan con la sierra de Guadarrama coronan estas vetustas lindes, y se extienden hasta las orillas de los humedales, o se alzan orgullosas hasta las mismísimas faldas de castillos duros y centenarios como el que se eleva sobre los montículos de Iscar.

Cueva y refugio de salvajes humanos prehistóricos. Calzadas y cañadas reales, donde hollaron sus pisadas el Imperio más tremendo de todos los tiempos... La prostibularia y guerrera Roma; madre de todos los delirios.

Vientos gélidos azotan las esquinas en los fríos amaneceres, y el horizonte se tiñe de un rosa nupcial sobre el firmamento de estas avenidas de prosperidad, donde transitaron reyes, nobles, campeadores, campesinos y furibundos mercaderes.

En estos días he vuelto a pasear por la historia, llena de amoríos y traiciones, entre los estrechos adarves y las almenas dormidas...

Dentro de la zona de Tierra de Pinares a tiro de piedra de Iscar se encuentra la ciudad de Pedrajas de San Esteban, destacada por la elaboración del piñón, hecho por el que se autodefine El Piñón de España. Otras villas como la del Portillo, son famosas por sus riquísimos mantecados entre otras muchas cosas... Aquí siempre creció una buena madera...  Ya, que; si en la Campiña del Pisuerga el suelo es de arcilla, la tierra de pinares está cubierta de arena.

Tierra de Pinares es un ejemplo de belleza natural. Y un manuscrito latente de recuerdos imborrables... Y entre los parajes de las riberas de los ríos como el Eresma y el Cega con sus miles de hectáreas de pinar que lo circundan, se encuentra sumergido y custodiado a buen recaudo por la Doña y bella Susana, un museo de amor bellamente engalanado, que rezuma Danza por los muros de su piel.  La Torre del homenaje más sensible y mágica que pueda existir.... La casona donde reside el aliento y la historia de mi maestra MARIEMMA... Por estos lares he estado transitando estos maravillosos días... Y me quedó bien claro que Tierra de Pinares es una comarca con naturaleza y Danza para dar y tomar. Donde mi imaginación se perdió bailando entre las lagunas y humedales, Castillos de cuentos y batallas bajo un cielo de un azul tan intenso como el océano...

Tendré que volver muchas veces a estas bellas heredades, para poder recordarme de vez en cuando....

Antonio Canales

3 comentarios:

  1. He entrado contigo en el corazón de nuestra historia. Que gran placer divisar junto a ti el horizonte , ver los pinos desde una torre. Que gran regalo nos haces diariamente con tus maravillosos escritos! Que placer poder tener este momento de intimidad con el autor de tan sublime cuento, para decirle que mi admiración no tiene limites, que le amo

    ResponderEliminar
  2. Cada día cuando escribo o transcribo mis viajes pienso en ti y en todas esas personas a las que quiero .... Besossss de primavera ...

    ResponderEliminar
  3. Mmmm por favor explicame eso de "rancios a mas no poder"!!!

    ResponderEliminar